En los foros oficiales de Battle.net, Lylirra nos habla de cómo salieron a la palestra algunos de los cambios y ajustes que se han hecho en la versión de consolas con respecto a la de PC, y cómo estos pueden repercutir en ella.
Lylirra
Aunque el núcleo del juego en consolas está basado en el juego de PC -- habiendo el mismo contenido, sistemas, clases, habilidades y runas que en PC -- la versión de consolas de Diablo III es, ciertamente, una cosa diferente. Es una experiencia familiar, pero única en definitiva. Nuestro objetivo al desarrollar Diablo III para consolas era llevar la misma experiencia de juego visceral que se consigue usando un ratón y un teclado, pero al mismo tiempo haceros sentir con naturalidad el uso de un mando. (Básicamente, si prefieres una plataforma a la otra, puedes elegir esa versión y saber que ha sido ajustada para encajar lo mejor posible en la plataforma de tu elección).
Para conseguir esto, hemos realizado diversos cambios en las versiones de PS3 y Xbox 360, incluyendo un rediseño completo de la interfaz y los controles de personaje, administración del inventario, y en el ritmo de los combates y las luchas contra los jefes. El asunto de los objetos es predominantemente el mismo, pero hemos realizado algunos ajustes menores en cuanto a la itemización. Caerán menos objetos, pero en general serán de mejor calidad. Hay una posibilidad de que, cuando un objeto blanco o gris caiga, sea convertido automáticamente en oro. Estos cambios fueron hechos para ayudar hacer la experiencia de juego más fluida y mantener a los jugadores enfrascados en el combate (y fuera de la ventana de su inventario) todo lo posible. Administrar el inventario es un poco más difícil en la versión de consolas que en la de PC, donde tienes un ratón para navegar rápidamente entre menús, así que este era un cambio clave para PS3 y Xbox 360.
Algunos de estos cambios inspiraron ajustes futuros que nos gustaría hacer en PC, y muchos de ellos fueron a su vez inspirados por planes que ya teníamos para mejorar la itemización. Como dividimos el desarrollo (esto es, la versión de PC y la de consolas más o menos tienen equipos separados y ciclos de desarrollo), es posible que un juego reciba cambios antes que el otro. Con el tiempo, ambos estarán al día. Aún así, PC siempre será la plataforma líder.
Admitimos que el juego que creamos como Diablo III tiene defectos. Los hemos admitido públicamente ante nuestros jugadores y queremos solventarlos. El siguiente gran paso es dar con la forma correcta para arreglarlos y, en el proceso, conseguir realmente ese ansia de botín y ese sentimiento de "OH DIOS UN NARANJA" que muchos jugadores echan de menos ahora mismo.
Para conseguir esto, hemos realizado diversos cambios en las versiones de PS3 y Xbox 360, incluyendo un rediseño completo de la interfaz y los controles de personaje, administración del inventario, y en el ritmo de los combates y las luchas contra los jefes. El asunto de los objetos es predominantemente el mismo, pero hemos realizado algunos ajustes menores en cuanto a la itemización. Caerán menos objetos, pero en general serán de mejor calidad. Hay una posibilidad de que, cuando un objeto blanco o gris caiga, sea convertido automáticamente en oro. Estos cambios fueron hechos para ayudar hacer la experiencia de juego más fluida y mantener a los jugadores enfrascados en el combate (y fuera de la ventana de su inventario) todo lo posible. Administrar el inventario es un poco más difícil en la versión de consolas que en la de PC, donde tienes un ratón para navegar rápidamente entre menús, así que este era un cambio clave para PS3 y Xbox 360.
Algunos de estos cambios inspiraron ajustes futuros que nos gustaría hacer en PC, y muchos de ellos fueron a su vez inspirados por planes que ya teníamos para mejorar la itemización. Como dividimos el desarrollo (esto es, la versión de PC y la de consolas más o menos tienen equipos separados y ciclos de desarrollo), es posible que un juego reciba cambios antes que el otro. Con el tiempo, ambos estarán al día. Aún así, PC siempre será la plataforma líder.
Admitimos que el juego que creamos como Diablo III tiene defectos. Los hemos admitido públicamente ante nuestros jugadores y queremos solventarlos. El siguiente gran paso es dar con la forma correcta para arreglarlos y, en el proceso, conseguir realmente ese ansia de botín y ese sentimiento de "OH DIOS UN NARANJA" que muchos jugadores echan de menos ahora mismo.